Saturday, December 16, 2017

Discernimiento LCRC




Status

En estos días la Legión ha venido publicando las historias “vocacionales” de los jóvenes que reciben la ordenación sacerdotal. Según hemos expresado en otras ocasiones, esto debería de ser un motivo de gran alegría para toda la Iglesia; sin embargo es causa de mortificación y zozobra.

Lamentablemente el Vaticano ha permitido que la Congregación fundada por Marcial Maciel siga reclutando y siga ordenando sacerdotes sin antes “limpiar” la situación. Así como en la historia de Pablo VI quedará la negligencia de haber concedido el Decreto de Aprobación y en la historia de Juan Pablo II la negligencia de haber protegido a un criminal y haberlo puesto como ejemplo de guía para la juventud… en la historia del Papa Francisco quedará la incoherencia de su tolerancia 0 y su compromiso con el abuso.

Recordemos que los jóvenes pertenecientes a la congregación de los legionarios que recibirán el Sacramento del Orden, en su mayoría carecen de experiencia pastoral para el ministerio (a diferencia de lo que ocurre en los seminarios sanos de la Iglesia); en sus llamadas “prácticas apostólicas” han sido mano de obra gratuita organizando campamentos, cuidando niños y recaudando becas. La serie de eventos que han vivido en su formación durante el seminario requeriría un especial cuidado en el discernimiento.

Pequeño detalle, los legionarios no llaman “seminario” a ninguno de sus centros siguiendo el deseo de su Fundador de distanciarse de la vida diocesana.

Aunque reconocemos que en la Legión ha mejorado un poco el discernimiento, los candidatos al sacerdocio aún reciben bastantes condicionamientos mentales en el camino de la libre determinación. Aún no hay transparencia en casi ninguno de los procesos internos y los destinos siguen siendo controlados por un grupo seleccionado. Señalamos con claridad que las mejoras en el tema del discernimiento son mérito de las presiones y denuncias que han hecho tantos exlegionarios y ex3GFs exponiendo los métodos de “motivación a la perseverancia” que usan dentro del grupo.




Convicciones

Los legionarios publican las “historias” y “testimonios” de quienes reciben la ordenación. Aunque la mayoría de los escritos que publican tienen poca historia y menos testimonio (pues son auténticos ejercicios de narcisismo) no dejan de ser una ventana abierta a las “motivaciones” de cara a la “vocación”.


Recordamos el “testimonio” del año pasado de quien aspiraba a organizar campamentos o del otro que le gustaba cómo se vestían, etc. ¡¡Qué contraste tan grande cuando escuchas el testimonio de una Misionera de la Caridad!! ¡Cómo se nota hasta en este aspecto la existencia de un carisma y la carencia del mismo!

Leyendo comparativamente el testimonio de neosacerdotes del clero diocesano de varias diócesis (las que lo publican) nos ha parecido ver cómo el testimonio está centrado en la acción de Dios en la persona y el servicio a la Iglesia, de pronto , como excepción, sale algún testimonio donde la narración está centrada en el individuo y no en la Iglesia ni en Dios. Pues en los testimonios que ha entregado la Legión, casi desde que inició esta práctica en los 80s, la narrativa tiene como eje al individuo donde sí se menciona la acción de Dios, pero el eje es el candidato… de pronto hay alguna excepción, pero en general la tónica es así.

Recordemos por ejemplo el testimonio de Rogelio Aguilera Jiménez[1] ordenado el año 2010. Su testimonio lleva el título “¿Sabes por qué jamás he dudado?”





Según su narración, Rogelio “sintió con claridad” su llamado en un retiro del RC. Dejó los estudios universitarios e ingresó en la Legión donde recibió, 12 años después, la ordenación… “jamás habiendo dudado”.

Rogelio Aguilera actualmente se encuentra en el estado laical tratando de emprender una nueva vida a sus casi 40 años de vida.

¿Quiénes fueron sus formadores? ¿Quiénes le “ayudaron” en su discernimiento? (sin orden cronológico): Carlos Mora, Donal Clancy, Rosalío Elizondo, Jesús María Delgado, Carlos Carcía de Alvear.

Cuando la Legión trata el caso de Rogelio, lo presenta como un hecho atribuible al individuo “no pudo resistir la situación que causó el descubrir la doble vida del Fundador”. Se reúnen testimonios y se presentan al Vaticano. El individuo falla y por eso pide salir del estado clerical… El testimonio de Rogelio, redactado con todos los condicionamientos legionarios, da “testimonio” de una convicción muy profunda, pero de circunstancias. Como alguna vez dijo el mismísimo Marcial Maciel “son como plantas de invernadero”; es decir, fuera de un ambiente de ensueño, todo se replantea.

Pero el caso de Rogelio difícilmente es atribuible a él, aunque haya escrito que jamás había dudado. Para empezar, desde el punto de vista canónico su profesión religiosa posiblemente fue inválida. Sus llamadas prácticas apostólicas sólo duraron unos meses y sólo fue acompañante de un reclutador, el resto del tiempo en centro de formación. Es decir, las posibilidades que Rogelio tuvo de un auténtico discernimiento antes de la ordenación fueron muy escasas.


Dudas

Otro de los testimonios que hace referencia a la “certeza” es el de Óscar. Óscar ingresó al Seminario Menor de la Legión (llamado apostólica) en 1992, a la edad de ¡¡12 años!! Inició su noviciado en 1996 recién cumplidos sus 16 años. Algunos de sus formadores y directores espirituales fueron (sin orden cronológico): Jesús María Delgado, Fernando Limón, Donal Clancy, Carlos García de Alvear… las etapas decisivas en su discernimiento vocacional las vivió bajo Donal Clancy y Carlos García.

Óscar Pérez Lomán escribió en su testimonio[2]: «Agradezco a Dios la gracia de nunca dudar de mi vocación sacerdotal. Ha habido momentos duros, de dificultad, de prueba, pero durante estos diecinueve años en la Legión […] no he dudado del llamado de Dios. Eso sí, le he renovado mi entrega especialmente en los momentos claves de mi vida: entrada al noviciado, profesión religiosa, profesión perpetua, diaconado y ahora, en la ordenación sacerdotal.».



Óscar de sus 37 años de vida (al día de hoy), sólo pudo vivir 12 con su familia; el resto en la Legión. En su texto incluye los años del seminario menor como pertenencia a la Congregación; es decir 19 años. ¡¡19 años de discernimiento sin dudar jamás!! ¿es eso discernimiento o es mentalización?

Los hechos hablan por sí mismos. Pérez Lomán no ha dejado el sacerdocio ni ha salido de la Congregación. En meses pasados por la redes sociales circularon distintas fotos del implicado, algunas tomadas por su pareja del momento, algunas tomadas por él mismo (“selfies”). El contenido de algunas de las mismas era completamente explícito[3] incluso al grado de calificarse como imágenes porno. La divulgación de las imágenes se debió a que él mismo practicó lo que actualmente se conoce como “sexting” (envío de contenido sexual por mensajes). Es por ello que han circulado imágenes con dos mujeres distintas y textos (capturas-de-pantalla) que hacen referencia a una tercera.

Mostrando su vitalidad sexual


Con un testimonio de semejante “calibre” (no es el único), ¿podemos hablar de discernimiento? Llama poderosamente la atención que Donal Clancy esté presente en varios testimonios y siga como “director espiritual”. La situación de Óscar nos habla no de una “debilidad”, sino de una patología. ¿Dónde está la formación legionaria? ¿dónde el discernimiento?... De hecho resulta escandalosa la conformación actual de los responsables del “discernimiento”:

·        Formación inicial: Sylvester Heereman quien explícitamente dijo que los que salen de la Legión no piensan adecuadamente y son soberbios.
·        Formación inicial (miembro del equipo): Marcelino de Andrés que acompañó a Maciel junto con su amante y una de sus hijas durante varios años hasta el lecho de muerte.
·        Formación inicial (miembro del equipo): Gerardo Flores, superior perenne, cómplice de encubrimiento de abusos en las apostólicas y co-responsable de la “cortina de humo” en el caso del rector Santiago Garza.
·        Formación permanente: Juan José Arrieta quien ya había salido de la Congregación y que incluso había externado antes del Capítulo General (2014) que tenía sus maletas preparadas. No por nada denominan a Arrieta, “el camaleón”.
·        Asignación de destinos: Juan María Sabadell, cómplice del despojo a viudas, responsable de la recaudación en EUA, administrador territorial en EUA… al igual que Óscar Pérez Lomán desde los 12 años se encuentra bajo el influjo de los legionarios. Sabadell consiguió su puesto en el Consejo con una carta pidiendo disculpas por lo que hizo Maciel, pero no ha pedido disculpas por otras cosas que ha hecho la Legión y en las que él mismo ha participado.

Si consideramos la trayectoria de Óscar Pérez constatamos que la mayor parte de su vida la ha pasado en la Legión. Antes de la pubertad ya estaba en el seminario menor; ¿podríamos considerar su desequilibrio psicosexual como algo externo a la Legión?, ¿algo atribuible meramente al individuo como quiere hacer creer la Legión en el caso de Rogelio y otros?, ¿dónde está el discernimiento de parte de la Institución?, ¿acaso no son sometidos los candidatos a pruebas psicológicas?

El actual sucesor de Marcial y director general, Eduardo Robles Gil escribió una carta exhortando a la perseverancia[4] diciendo que: A la pregunta “¿sabéis si son dignos?” en el rito de la ordenación, responde la Legión…, dice incluso cínicamente “La Legión da la cara”. ¿Dónde estaban Donal Clancy y Carlos García cuando se hizo dicha pregunta sobre Pérez Lomán? ¿Dónde está la formación ética (Donal fue profesor en el Ateneo) cuando Pérez Lomán seducía a sus parejas? Y más importante que todo ¿DÓNDE ESTÁ EL DISCERNIMIENTO?


Idoneidad

Se denomina “idoneidad” al conjunto de características y valoraciones que debe reunir un varón para considerar que humanamente no hay ningún impedimento para vivir la vida sacerdotal. A la par de tal valoración humana, la Iglesia “ausculta” el corazón para conocer su “idoneidad” espiritual. Junto con el candidato, ambos, la Iglesia y el candidato, disciernen si esos elementos humano-espirituales se corresponden con un llamado de parte de Dios.



El camino hasta el sacerdocio en la Iglesia tiene una larga trayectoria de maduración a partir del Concilio de Trento. 450 años de la existencia de los “semilleros” o seminarios con la experiencia y aportación de tantos santos que han enriquecido el discernimiento. ¿Qué sucede en la Legión? ¿Es a causa del uso y abuso del sacramento?, ¿de la instrumentalización pelagiana del ministerio sacerdotal?, ¿de la obsesión por “crecer más”?, ¿es a causa de la fantasía de grupo “divino” federado?

Semanas antes del escándalo de Óscar Pérez la Legión publicó una nota a causa del escándalo[5] del Rector del Colegio Mater Ecclesiae (un colegio en Roma para recibir seminaristas diocesanos que desean estudiar en Universidades Pontificas o en el Ateneo).

Óscar Turrión tuvo como formadores (sin orden cronológico): Guillermo Izquierdo (rip, depredador sexual), Juan Manuel Dueñas, Peter Coates, Álvaro Corcuera, Fergus O’Carroll, Thomas Williams, Jesús María Delgado, Eduardo de la Torre, Florencio Sánchez…  Abusadores, abusados, defraudadores, mentirosos y hasta capitulares histriónicos…. De hecho la mayoría de los formadores legionarios hasta aproximadamente 2013 pertenecen a este núcleo y pueden recibir alguno de esos apelativos.

Óscar Turrión ingresó en la Legión desde pequeño. Su conciencia y su visión del mundo fueron completamente modeladas según los Superiores legionarios. Turrión, sin embargo, sí manifestó dudas… las cuales fueron convenientemente disipadas con la conveniente motivación. Poco después de haber recibido la ordenación sacerdotal volvió a manifestar sus inquietudes pero habiendo sido completamente formado en la Legión, carecía de las herramientas humanas para hacer un planteamiento más determinante. Óscar fue movido de un centro a otro y esos cambios eran suficientes para moderar sus inquietudes. Pero a partir de que se conocieron diversos fraudes institucionales, además de la vida criminal del Fundador, la inquietud de Óscar se hizo constante. La falta de verdadero soporte espiritual y la ausencia de un carisma en la Congregación, lo llevaron a buscar un refugio afectivo… y tuvo un hijo.

Pero Óscar no quería ser como su antiguo superior Thomas Williams, ni caer en el juego de mentiras de su otro superior Álvaro Corcuera, así que informó al superior perenne de turno Jesús María Delgado[6]. Pero este Superior perenne caviló que lo de Turrión era una treta para salir de la Congregación… ¡y le pidió pruebas de paternidad!

A medida que varios de los compañeros de Óscar abandonaban la Congregación y algunos incluso se secularizaban, su inquietud creció, aunque no tenía “capacidad” de obrar nada fuera de la Legión. Fue nombrado rector en el Mater Ecclesiae donde ya llevaba tiempo residiendo, un poco aislado del resto de la vida de la Legión…

“Afortunadamente” ante todas las frustraciones de “su” Congregación fraudulenta[7], tenía su refugio afectivo. Es así como engendró un segundo hijo con la misma mujer y volvió a manifestar su inquietud. Pidió salir de la Congregación, pero los superiores le mandaron a un período de discernimiento extra-domum, lo cual es ridículo. En la Compañía de Jesús cuando se trata de discernimiento te invitan a realizar ejercicios espirituales, de los auténticos[8]… no te exponen a una situación donde lo que no vas a hacer es discernir. Pero la Legión en realidad no buscaba el discernimiento de Óscar Turrión, sino enjuagarse las manos. Además, estamos hablando de una persona de más de 40 años que ingresó en la Legión a los 12 años y que no había tenido ninguna otra experiencia.

Apenas unas semanas después de que Óscar salió a su “discernimiento” la Legión usó su nombre para pedir dinero. El cinismo y la hipocresía de la Legión pidiendo dinero usando el nombre de una persona que reiteradamente había manifestado su inquietud vocacional, que se encontraba de facto fuera de la Congregación fue lo que reventó el tema en las redes sociales.

La Legión, reafirmando su naturaleza, pidió a Turrión una carta en la que la víctima exculpaba a su victimario.

La carta fue publicada como parte del comunicado del vocero oficial en el que decía en síntesis que la Legión estaba limpia y todo era culpa de un religioso calenturiento que se fue enfriando espiritualmente (la tesis de Jesús María Delgado).

La trayectoria de Óscar Turrión a grandes retazos permite entender cómo sigue vigente un sistema donde la vocación es inducida y está en función de la Institución y no de la Iglesia. El discernimiento de Turrión fue un fraude a base de motivaciones de perseverancia. Nunca debió de haber recibido la ordenación… aunque Eduardo Robles Gil con su mentalidad pelagiana diga que Turrión escribió una carta donde manifestaba su deseo de recibir la ordenación…

Habiendo sido ordenado, debió de haber recibido la atención espiritual pertinente para un verdadero discernimiento, o incluso ayudarle a emprender una vida secular no sólo por caridad, sino por justicia… habiendo estado bajo el régimen formativo legionario desde los 12 años.


Status, Convicciones, Dudas, Idoneidad…

Los casos mencionados son sólo algunos, pues incluso en las redes sociales han sonado recientemente otros, como el caso de Jesús Murillo o el de Santiago Garza.

Santiago Garza no sólo era rector de un seminario menor que consumía pornografía situándose en la línea de los otros superiores legionarios depredadores sexuales o adictos a la pornografía como se dice de uno que fue Maestro de Novicios durante muchos años.

Además, Santiago Garza, rector del seminario menor de los legionarios, ha mantenido algún encuentro homosexual. Los demás superiores legionarios, como es costumbre, actúan con hermetismo antes que pensar en el daño que se causa a los adolescentes…

El rector de la dirección general tuvo un hijo, el rector del Mater Ecclesiae tuvo dos hijos y el rector de la apostólica no puede tener hijo porque su relación es homosexual.


¿Se puede decir que una Congregación con esta clase de Superiores y Formadores tiene un carisma procedente del Evangelio?

¿Se puede pensar que una Congregación donde el Superior General miente reiteradamente tiene un carisma evangélico?

¿Es posible considerar un carisma en una Congregación que induce vocaciones y las victimiza y las revictimiza?

¿Es posible llamar católica con un carisma a una Congregación que instrumentaliza al sacerdocio?

Por sus frutos los conoceréis… y no por su propaganda. La Legión y su Movimiento no son Obra de Dios.




[3] Veritas Liberabit Vos no se prestará al juego el morbo y no publicará ninguna de las imágenes. Cuando el tema apareció en Facebook, muchos pidieron “pruebas”, lo cual es legítimo y no sólo aprobamos sino alentamos contrastar lo dicho con la realidad para encontrar la verdad. Sin embargo, debido el contenido explícito de dichas pruebas, no puede publicarse (salvo lo ya mostrado) por dignidad personal.
[4] Carta a los que hacían ejercicios espirituales. Ver http://liberabitveritas.blogspot.it/2017/08/analisis-de-la-carta-sobre-el.html
[6] Jesús María Delgado no sólo ha sido Superior perenne sino que lleva en sí mucho del daño causado por ello; por ejemplo, en lugar de considerar el discernimiento, él afirma que los que salen de la Congregación carecen de vida espiritual. El nombramiento de Delgado como Director Territorial es una de las farsas de Eduardo Robles Gil que al igual que sus predecesores piensa que puede seguir engañando. En su argumento mentiroso dijo que el puesto de Delgado no es de superior, pero el secretario de Delgado tiene todas las atribuciones de un secretario territorial según explícitamente dice el nombramiento. Eduardo Robles Gil sigue intentando engañar.
[7] Hay un texto publicado donde incluso se le llama “Las Orden Maldita”.
[8] Ya hemos comentado como en la Legión, los llamados ejercicios espirituales son un conjunto de meditaciones teledirigidas; es decir, son dirigidas, y el prefijo “tele” es porque la temática y el contenido viene establecido desde la Cúpula. Es muy difícil hacer discernimiento en los llamados ejercicios espirituales de los legionarios porque todas las meditaciones están orientadas a la “generosidad”.